Me siento con pocas ganas de escribir todo lo que sucede a
mi alrededor, las teclas se teclean solas y rara vez veo la pantalla para que
escriben; no es la primera vez que pasa en varios días, pero si la primera que
capitalizo esa palabras.
Me siento solo, me siento usado.
Siento que gaste tiempo en amistades que al final del da solo se miraban su ombligo, que lo importante nunca es el otro; sino lo que el otro puede generar en su entorno y en él.
Me siento vacio, triste y sin amigos.
Paso mis días solo entre interacciones digitales poco reales
No tengo una esperanza para el futuro, siento que me gato y rompo en pedazos que no ayudan a nadie. Que no generan nada.
No soy el cambio y no soy mi cura. Soy mi veneno que arruina mis horas.
Necesito salvarme y no encuentro manera.
Me siento solo, me siento usado.
Siento que gaste tiempo en amistades que al final del da solo se miraban su ombligo, que lo importante nunca es el otro; sino lo que el otro puede generar en su entorno y en él.
Me siento vacio, triste y sin amigos.
Paso mis días solo entre interacciones digitales poco reales
No tengo una esperanza para el futuro, siento que me gato y rompo en pedazos que no ayudan a nadie. Que no generan nada.
No soy el cambio y no soy mi cura. Soy mi veneno que arruina mis horas.
Necesito salvarme y no encuentro manera.
Me ahogo en sueños heroicos donde una princesa me rescata.
Ayúdame. Abrázame. No me hables pero haceme sentir que
estas ahí afuera